El interior de una habitación es un indicador del estado interno de su ocupante. Es común que cualquier persona decore una habitación de acuerdo con su sentimiento interior. Al elegir el color de las paredes de la sala de estar, debe centrarse no solo en sus propias preferencias de gusto, sino también en la psicología del color. De lo contrario, no podrá permanecer en el interior durante mucho tiempo y el interior no dispondrá a sus invitados a conversaciones sinceras