Un sistema de calefacción cerrado es uno de los dos tipos principales de sistemas en los que el movimiento del refrigerante se realiza mediante una bomba de circulación especial, es decir, a la fuerza. Otro rasgo característico de este tipo de calefacción es la presencia de un vaso de expansión cerrado, también llamado depósito de membrana.
Dispositivo
El sistema de calefacción cerrado monotubo en su diseño tiene varios detalles estructurales:
- Caldera de calefacción.
- Bomba de circulación.
- Radiadores de calefacción (baterías).
- Pipeline.
- Depósito de expansión de membrana.
Principio de funcionamiento
El sistema de calefacción cerrado funciona de la siguiente manera. Después de que uno de los dispositivos principales (caldera) calienta el refrigerante, aumentará el volumen de líquido en el sistema, que luego irá al tanque de expansión. Este tanque tiene una membrana de goma especial, y elel recipiente se asemeja a una cierta cápsula en su forma. Convencionalmente, el depósito de expansión se puede dividir en dos partes, entre las cuales una es una cámara de agua (que recibe el exceso de agua formada), y la otra es aire (se llena de nitrógeno, mientras que todo este sistema está bajo una cierta presión).
Vale la pena señalar que un sistema de calefacción cerrado (en la segunda foto se muestra un diagrama de su principio de funcionamiento) tiende a devolver el agua que entró en el tanque cuando se calentó el dispositivo. Entra en los radiadores con la ayuda de una bomba de circulación. Y solo cuando no hay suficiente líquido en las tuberías. Para excluir la posibilidad de formación de gas, el agua se devuelve desde el tanque de expansión a la caldera y sus elementos posteriores. Al mismo tiempo, el dispositivo admite tanto agua corriente como anticongelante como refrigerante.
Ventajas y desventajas
Una de las principales características de un sistema de calefacción cerrado es su completo aislamiento del entorno exterior. Por lo tanto, se excluye completamente la penetración de cualquier aire en el dispositivo. Y esto prolonga la vida útil de todo el sistema de calefacción (la bomba no sufre así, "tragando" aire en sí misma, no hay corrosión que pueda ser causada por la formación de burbujas dentro de la tubería). Además, debido a la presencia de un tanque de expansión, no puede monitorear el nivel de agua restante en los radiadores. Cuando la caldera se calienta, el depósito absorbe agua y la devuelve cuando se enfría.
Gracias a esto, no se produce ni la formación de gases ni la evaporación de agua dentro del sistema. Además, este tipo de calefacción es útil porque tiene la capacidad de controlar y ajustar la temperatura en diferentes habitaciones de la habitación. Sin embargo, esto solo es realista cuando hay una bomba de circulación en el sistema. Lo mejor es trabajar con un termostato de ambiente, para que puedas controlar completamente el nivel de la temperatura configurada. Entre las deficiencias, quizás la única negativa es la dependencia de este sistema de la energía eléctrica. Sin embargo, esto difícilmente puede llamarse un menos.