En el proceso de realizar trabajos de techado, así como al reparar el techo, se coloca material impermeabilizante o se derriten masillas bituminosas, para lo cual se utiliza un quemador de propano. Además, también se puede utilizar para secar superficies, cortar o soldar metales, calentar piezas o productos a altas temperaturas, quemar pintura vieja y otros trabajos que requieran estas condiciones.
Por lo general, un quemador de propano es una taza de metal, que está equipada con una boquilla y un mango de plástico (o madera) sujeto al cuerpo. El vidrio del dispositivo está diseñado de tal manera que protege la llama contra el viento. El gas entra en la vivienda a través de un gasoducto. El quemador de propano está equipado con una válvula que facilita el ajuste del suministro de gas en la cantidad correcta. La longitud de la llama también es ajustable. El ahorro de propano se consigue gracias a que el aparato está equipado con un reductor que controla su consumo. Casi todos los tipos de quemadores son capaces de aspirar aire de la atmósfera. El dispositivo se lanza usando un encendedor o fósforos.
El quemador de propano está equipado con un dispositivo que ayuda a regular los modos de funcionamiento. Muchos modelos tienen un modo de espera, que le permite no desperdiciar gas en vano durante una pausa en el trabajo. Durante la operación, el dispositivo se calienta a temperaturas muy altas, lo que obliga al fabricante a utilizar solo materiales de alta resistencia para la fabricación de estos productos. El quemador de propano para techos está equipado con un mango, cuya longitud no es más de un metro. El peso de todo el dispositivo es de 1-1,5 kilogramos. La protección contra quemaduras está garantizada por la presencia de un soporte de plástico resistente al calor o de madera de alta resistencia.
Hay ciertas reglas para trabajar con un dispositivo como un quemador de gas propano. Si se utiliza material para techos o algún otro material moderno para techos construidos como material impermeabilizante, primero debe preparar la base para su colocación. Para hacer esto, la base debe limpiarse de escombros y luego nivelarse con una regla de concreto, si es necesario. El material enrollado se extiende sobre toda el área del techo para que las láminas adyacentes formen una superposición, cuyo ancho es de hasta 90 milímetros. Usando un quemador, los rollos se fijan en la base del techo. Cuando la llama caliente esta base y la parte inferior del rollo, puede extender lentamentematerial, luego presionarlo contra la base. Más adelante a lo largo del lienzo, debe pasar un rodillo manual para eliminar todos los espacios de aire.
La última etapa del uso del quemador consiste en calentar las costuras del material que se superponen. Las costuras deben enrollarse adicionalmente con una herramienta manual especial. El uso de un quemador de gas para el trabajo solo está permitido a temperaturas superiores a 15 grados bajo cero. Las temperaturas más bajas obligan al uso de aparatos de combustible líquido.